Lewandowski en el FC Barcelona: ¡el sueño de los polacos se ha hecho realidad!
El traspaso del delantero polaco Robert Lewandowski, de 34 años, al FC Barcelona copaba los titulares de todos los periódicos del fin de semana. El Bayern ha dicho 'sí' a una oferta catalana de 50 millones de euros. Los catalanes finalmente pagarán 45 millones de euros, más una tarifa variable de 5 millones de euros. El contrato con el Bayern expira el año que viene y los bávaros estaban cerrados a una posible venta, pero finalmente, fruto de las presiones del propio Lewandowski, accedieron a desprenderse de su jugador favorito. El dinero de esta transferencia también pagará las estancias del jugador en sus clubes anteriores. Clubes como Znicz Pruszków y Poznański Lech recibirán una inyección económica. Todo esto tiene poca importancia para los polacos, porque lo más importante es que un polaco jugará en el mejor club de fútbol del mundo, y no como portero, sino como delantero, como el gran Messi o la leyenda de Maradona.
Esta temporada, los polacos han logrado otros grandes récords deportivos, que ni siquiera se han atrevido a soñar hasta ahora, en el tenis mundial, gracias a Iga Świątek. Poca gente sabe que el mismo fin de semana de julio, cuando Lewy no salía de los titulares, Fajdek y Nowicki, destacados atletas polacos, se proclamaron campeones y subcampeones en lanzamiento de martillo, aunque en una disciplina atlética menos publicitada.
La situación económica se traduce en deporte y los éxitos de los deportistas están relacionados con su bienestar. Un país rico tiene patrocinadores ricos, infraestructura deportiva moderna y acceso a los eventos más importantes. Paradójicamente, los atletas pobres también triunfan, de países donde los dictadores exigen victorias emblemáticas, como los atletas rusos. Hay muchas paradojas en el deporte, pero solo hay un Lewandowski, y todos aman el fútbol en Polonia. Es un deporte que desarrolla muchas habilidades y el cuerpo. El éxito de Robert Lewandowski, al igual que el éxito de Adam Małysz, elevará la moral de los jóvenes. Más de ellos saldrán de detrás del ordenador al campo a entrenar, a estar con sus amigos, a tomar aire. ¡Y por esto, Lewandowski merece un gran hurra!
El traspaso del delantero polaco Robert Lewandowski, de 34 años, al FC Barcelona copaba los titulares de todos los periódicos del fin de semana. El Bayern ha dicho 'sí' a una oferta catalana de 50 millones de euros. Los catalanes finalmente pagarán 45 millones de euros, más una tarifa variable de 5 millones de euros. El contrato con el Bayern expira el año que viene y los bávaros estaban cerrados a una posible venta, pero finalmente, fruto de las presiones del propio Lewandowski, accedieron a desprenderse de su jugador favorito. El dinero de esta transferencia también pagará las estancias del jugador en sus clubes anteriores. Clubes como Znicz Pruszków y Poznański Lech recibirán una inyección económica. Todo esto tiene poca importancia para los polacos, porque lo más importante es que un polaco jugará en el mejor club de fútbol del mundo, y no como portero, sino como delantero, como el gran Messi o la leyenda de Maradona.
Esta temporada, los polacos han logrado otros grandes récords deportivos, que ni siquiera se han atrevido a soñar hasta ahora, en el tenis mundial, gracias a Iga Świątek. Poca gente sabe que el mismo fin de semana de julio, cuando Lewy no salía de los titulares, Fajdek y Nowicki, destacados atletas polacos, se proclamaron campeones y subcampeones en lanzamiento de martillo, aunque en una disciplina atlética menos publicitada.
La situación económica se traduce en deporte y los éxitos de los deportistas están relacionados con su bienestar. Un país rico tiene patrocinadores ricos, infraestructura deportiva moderna y acceso a los eventos más importantes. Paradójicamente, los atletas pobres también triunfan, de países donde los dictadores exigen victorias emblemáticas, como los atletas rusos. Hay muchas paradojas en el deporte, pero solo hay un Lewandowski, y todos aman el fútbol en Polonia. Es un deporte que desarrolla muchas habilidades y el cuerpo. El éxito de Robert Lewandowski, al igual que el éxito de Adam Małysz, elevará la moral de los jóvenes. Más de ellos saldrán de detrás del ordenador al campo a entrenar, a estar con sus amigos, a tomar aire. ¡Y por esto, Lewandowski merece un gran hurra!
6 users upvote it!
0 answers